jueves, 9 de octubre de 2008

El Piratas en el Callao que yo conocí

Hernán Garrido-Lecca es un ser corrupto. Y no lo digo refiriéndome a los escándalos por los hospitales, sus cifras que no cuadren o sus problemas como político, empresario y aprista. Me refiero, más bien a su doble imagen: la de empresario vivaz y astuto/político corrupto, violento y prepotente, y la de narrador, creador, "productor" (para evitar decir artista).

Como dice Giacosa en esta entrevista, el primer Garrido-Lecca que él conoció era una persona amable, interesante, inspiradora y creativa. Yo puedo decir lo mismo, aunque nunca lo conocí.


Piratas

Cuando recibí Piratas en el Callao como regalo de fin de grado casi ni le di bola. Era uno de mis regalos de Navidad adelantados y la verdad que estaba más preocupado por encontrar los regalos "firmes", los escondidos. Hasta que un día, aburrido, cogí el libro y lo leí de principio a fin en unos cuantos minutos.

La historia (que recuerdo a la perfección, pese a que sólo la leí una vez y bastó para que me cautive), trataba sobre el viaje en el tiempo que hacen dos chicos limeños por accidente luego de hacer una excursión al Real Felipe. Ambos protagonistas -cuyos nombres no recuerdo- ayudan a los valientes peruanos a combatir a los piratas invasores del puerto del Callao. La historia me cautivó inmediatamente: me había vuelto hace poco tiempo fan de "Back to the Future" y estaba afanado con todo eso de viajar en el tiempo, alterar el pasado, encontrar nuevas realidades y emprender nuevas aventuras. También estaba afanado con los Caballeros del Zodíaco y con que me compren un N64.

Yo no sabía que Garrido-Lecca había creado esta historia. En ese entonces (1996), no sabía quién era Garrido-Lecca. No me podría haber importado menos. Tampoco sabía que era aprista o que iba a pedir años después que Alan García sea juzgado. Sí sabía quién era Alan García, desde muy chiquito. Era el diablo. En palabras de mi abuela: Alan García es un grandísimo hijo de puta, el ladrón. Yo no sabía quién era Alan porque ni si quiera aparecía en los noticieros. Nadie hablaba mucho de él. Había fugado del país.

Hasta hace unas horas no sabía que Garrido-Lecca era autor de Piratas en el Callao. Sabía que había participado en la producción de la fracasada película (que nunca pensé en ver), pero nada más. Ahora me quedo un poco sorprendido y no sé qué explicación darle a este hecho: ¿Cómo el autor de una de mis historias favoritas de mi niñez es una bestia de este calibre?

Conclusión

Garrido-Lecca es una bestia inmunda y de eso no hay duda. Pero me sigue gustando la historia y le sigo teniendo cariño. Si pudiera viajar en el tiempo -tal y como los protagonistas de la novela corta- y se me diera la oportunidad de volver a leerla supongo que lo haría con cierto asco. No me gustaría. Diría: "Qué voy a leer la historia de este chancho intransigente, aprista e hijo de puta".

Seguramente se dará el caso del niño que le pedirá a su mamá que le compre o consiga la novela esta, que su amiguito le ha contado que es divertida y que dejan leer en el colegio (porque en algunos colegios lo hacen, ya que es parte de una colección de Alfaguara). Y cuando la mamá le pregunte por el autor se espantará y no comprará el libro. Y si lo consigue revisará si es que hay alguna alusión al aprismo, las huelgas médicas, los contratos corruptos, los lobbies internacionales o si es que hay diálogos violentos como: "No me importa que tu madre tenga cáncer". El libro no tiene ninguno de esos elementos. Por ninguna parte.


Pero entonces me doy cuenta -con cierta pesadumbre- de dos cosas: 1) que la historia escrita por Garrido-Lecca me sigue gustando porque es una buena historia; y 2) que ya no soy un niño.


3 comentarios:

Anónimo dijo...

"¿de donde soy? soy de mi infancia..."

antoine de saint exupery

me gusto este post.

Cannabicus Prime dijo...

si te gustó este post, chequéate el It's just a plant

Anónimo dijo...

Brother volviendo ala niñez, y los viajes tiempo, espacio, sabes está también "El planeta de simios" de 1968 y "Bajo el planeta de los simios"1970, esas pelis son una metáfora de la vida, hasta la fecha mucho de las cosas que estan allí se presenta en la vida real, la prepotencia del poder, la teoría del evolucionismo frente al creacionismo, el fundamentalismo, el trato a los animales, la energia nuclear, el ocultar pruebas porque rebaten lo que es conocido como verdad científica. Hace años un grupo de estudiantes de arqueología en el Perú en sus practicas encontraron en una escavación un estrato mucho mas antigüo, que fue sepultado al toque para no contradecir la verdad que se exponia como "verdadera antiguedad". Bueno tiempo después descubrieron Caral con lo que cambió la cronología del Peru antiguo... y en esa peli, "el planeta..." también se vé lo mismo.

Y que tiene que ver esto con tu post, la verdad fuí a ver esa peli de Garrido, no me gusto nada porque había conatos de racismo y una parte de la trama me recordó tambien al "planeta de los simios"... el viaje accidental en el tiempo al futuro, en el caso de Taylor, el astronauta; y el del niño al pasado; se encuentran en este nuevo tiempo que es peligroso; en el final el astronauta solo en el futuro, con una mujer salvaje que no hablaba y un caballo, atrapado en un lugar sin salida, Vs el niño hecho ya un anciano olvidado en un islote y sin salida... bueno "el planeta..." es un peli de culto en la fecha, te recomiendo que la veas. Y Garrido Lecca es unpobre triste prepotente huevón y sabes pinso que también copión.