jueves, 1 de mayo de 2008

El tiro por la culata


Leo El Comercio y Caretas (calientita) y me parece que vivo en un país diferente al de las últimas semanas. Lo que parecía que iba a ser una ofensiva de la coalición reaccionaria luego de la negativa del Parlamento Europeo de incluir al MRTA en su lista de organizaciones terroristas y el cargamontón a APRODEH, que empezó con una alianza parlamentaria entre fujimoristas, apristas y humalistas, que pasó por las editoriales más asquerosas de Expreso y La Razón y terminó con Alan García sentenciando quién es traidor a la patria y quién no (y de terroristas el APRA sabe bastante, ¿no don Armando?).

Pero poco a poco, desde el martes la cosa empezaba a balancearse hacia un punto de equilibrio. Primero quedó claro que la negativa fue por la misma ineficiencia del Estado peruano que fue derrotado por una carta de una cara escrita por una ONG -bastante reconocida en el ámbito internacional- a la cual el Parlamento Europeo pidió opinión expresa. Segundo, los errores de los apristas que demostraron estar cagando fuera del water, como González Posada diciendo que los subversivos que atentaron contra las instalaciones de el Centro Comercial El Polo habían sido emerretistas cuando las personas detenidas y encarceladas por el hecho fueron sindicadas como militantes del PCP - Sendero Luminoso. Jalado en seguridad interna, señor congresista. Entonces... ¿dónde están las supuestas y contundentes pruebas de la presencia, organización, amenaza del MRTA? El asunto es claro, si el Ministerio del Interior las hubiera tenido, las habría mostrado a la opinión pública mediante sus medios de comunicación serviles, así aplastaba la credibilidad de APRODEH nacional e internacionalmente. Pero no pasó nada, ni media prueba.

La aburrida conversación concertada entre Alan García y Cecilia Valenzuela en el programa La cagada indiscreta del lunes 28 de marzo, demostró también que lo único que tiene el gobierno es la palabra del presidente, que sabemos que vale bien poco. No se presentaron pruebas, y por supuesto la Chichi no las exigió (gran periodista). Entonces, si bien el gobierno, la prensa servil y la derecha política lanzaron una ofensiva que buscó demoler a la anodina y pajera izquierda oenegista peruana, al final de la semana el balance es más bien un tiro por la culata.

Me baso en varios hechos expuestos en medios de prensa "independientes" (La República), "neutrales" (Caretas) y "serviles" (El Comercio) que han acabado opacando la pantomina del gobierno aprista y la bancada fujimorista (con Giampietri como conexión) y hacia el final de la semana más bien parece que la llamada de atención va para el Estado peruano que se está dando cuenta -como China al organizar las olimpiadas- que tener cumbres internacionales no es que todos te van a aplaudir por no hacer nada, sino que vas a estar en la mira y a tu país lo van a diseccionar y todos los trapos sucios salen al aire. Y tremendos trapos son los que la sociedad peruana ostenta, más aun con apristas, fujimoristas y reaccionarios compartiendo el poder.

Primero, el lunes en La República, el escándalo casi deja en el olvido una triste noticia que así como el terrorismo en el MRTA, también nos deja en claro el accionar sistemático de las FFAA durante el Conflicto Armado Interno: la desaparición forzada y la ejecución extrajudidial (a ver, ¿eso es terrorismo o que?). Son encontrados 81 cadáveres enterrados en el cuartel militar de Los Cabitos en Ayacucho, cuyos delitos fueron estar presuntamente relacionados a Sendero Luminoso, lo que no se explica en el caso de una mujer que fue asesinada estando embarazada y el hallazgo de cadáveres de niños. Luis Bromley, director del Instituto de Medicina Legal, lo describe magistralmente:

"La historia de Los Cabitos es escalofriante, da miedo, recuerda las historias de los campos de concentración nazis. Entre los 81 cuerpos recuperados, hay niños de cuatro y cinco años que fueron asesinados con un disparo en la cabeza"

Pero para los medios de comunicación y la opinión pública más importante era una carta y una lista. Y después dicen que no existen ciudadanos de primera y segunda clase en este país. La reacción de la coalición vino de uno de sus más despreciables esbirros, el marrano de La Razón. Da asco, pero lo voy a poner entero para que vean lo que es este tipo:

"Y un irresponsable de la catadura de Luis Bromley, nada menos que jefe del Instituto de Medicina Legal, ya lo está comparando con “los campos de concentración nazis”. Agrega que ya han encontrado cuatro hornos crematorios. ¿Para que haga esas estúpidas declaraciones le paga el Estado peruano? ¿Esta es la forma de tratar a quienes vencieron al terrorismo y nos dieron la paz de la cual el país disfruta? No es pues una exageración decir que hay una política de Estado y de animadversión contra las Fuerzas Armadas. Y en ese papel juegan un papel de primer orden, con ayuda de “cooperantes” extranjeros, las ONG tipo Aprodeh."

Aja... o sea que diablos importa decir la verdad... cuando te pagan, contenta a tus empleadores por sobre cualquier consideración ética -como hizo La Razon durante la época de Fujimori y sigue haciendo con el gobierno aprista- porque la plata es la que manda. Y segundo, a los militares ni con el pétalo de una rosa, así se demuestren crímenes de lesa humanidad. Es curiosa esta capacidad que tienen los judíos de actuar con el resto del mundo tal cual los nazis los trataron a ellos en la Segunda Guerra Mundial, con una total deshumanización y desprecio. Este tipo realmente es es un fascista. Esta noticia y las futuras exhumaciones (el plan carroña según La Razón) van a llamar la atención de muchas delegaciones europeas y también norteamericanas, así que la primera cachetada al gobierno cae por ahí.

Luego, el día martes 29, mientras el Congreso le intentaba dar un jalón de orejas a la Eurocámara, con lo cual aumentamos el papelón internacional, dos noticias remecieron a los inetresados en el tema de los DDHH y la justicia en el Perú: Salomón Lerner Febres, ex presidente de la CVR cuenta que Alejandro Toledo rechazó ayuda alemana para reparaciones a las víctimas de la violencia política por un monto de 70 millones de dólares. Todos sabemos que Toledo es un pobre diablo, pero ahora no va a poder llenarse la boca diciendo que él hizo enorme proezas por la reconciliación y los DDHH en el Perú. Pero lo mejor vino después, cuando el gobierno italiano le solicita a la interpol la detención de cuatro ex generales peruanos, entre ellos el ex dictador General EP (r) Francisco Morales Bermúdez (1975-1980), un "paradigma de la democracia" a la peruana que hacia el final de su vida tendrá que responder por las responsabilidades de su gobierno en el Plan Cóndor. Si bien Alan no va a extraditarlo, evidentemente esto le va a costar varios puntos de su poca popularidad en la Unión Europea, justo ad portas a la cumbre del ALC-UE.

Y el 30 fue la cereza sobre el helado. El Comercio publica una entrevista a Fernando Rospigliosi, alguien que sí habla como un Ministro del Interior, asegurando que el MRTA está sobredimensionado, claramente menciona que "el Ejercito no tendría ninguna evidencia de que el MRTA siga existiendo" y luego el artículo menciona que "ciertos grupos políticos, como el fujimorismo, están aprovechando la reciente decisión de la Eurocámara para sus propios fines". Como diría la Chichi... uyuyuyyyyy.

Luego, este mismo diario -que bastantes cercanías tiene con el gobierno- publica una entrevista con Walter Albán, ex defensor del pueblo, donde menciona los peligros de separar a organismos de DDHH de la función observadora del Estado. Se puede rescatar lo siguiente, según Albán: "Si queremos construir una sociedad democrática y un Estado de derecho fuertemente institucionalizado, tenemos que conseguir que haya compromisos claros entre la sociedad civil y el Estado. Una actitud de esta naturaleza no contribuye a esto".

Tercero, una extraña jugada del gobierno que favorecería a las ONG de DDHH, el nombramiento de Luis Alarcón Quintana como nuevo secretario ejecutivo del Consejo Nacional de Derechos Humanos (CNDH) en reemplazo del saliente Miguel Facundo Chinguel. Si bien es un personaje cercano al aprismo, por ahora la Coordinadora Nacional de DDHH ha saludado su nombramiento y la separación de Miguel Facundo, un ignorante en el tema. Esto huele a una moderación en las políticas del gobierno contra ONG, y quizá sea la respuesta a presiones internacionales por las acciones que están empañando la imagen política del Perú con miras a las cumbres. ¿Alan quería ser más papista que el Papa pero al final la UE le dijo "tranquilo loco"?

Y para finalizar, el caretas del 1 de mayo. Artículo principal: Marcha Forzada. Además de criticar la carta de APRODEH y la reacción interesada del aprismo y del fujimorismo, menciona un párrafo sobre lo de Moráles Bermúdez:

"Al cierre de esta edición, el diario El Comercio dio a conocer el documento de Interpol Italia, fechado el 5 de febrero y enviado a Lima para que se proceda a la extradición del ex presidente Francisco Morales Bermúdez y otros tres generales retirados por su supuesta participación en la “Operación Cóndor”, organizada por las dictaduras del Cono Sur para desaparecer a los opositores en la década del ’70. Aunque el Ejecutivo peruano ya había dado a conocer que no le dará trámite, y Morales Bermúdez tiene poderosos argumentos a su favor, el caso que vuelve como un fantasma después de treinta años le recuerda al gobierno que los Derechos Humanos no son materias para ser tratadas a la ligera. Más si un país alberga importantes cumbres internacionales y pretende jugar en las grandes ligas."

El trasatlánt
ico aprista acaba haciendo agua... uyuyuyuyuyyyyyyy

1 comentario:

Anónimo dijo...

amigo Cayo, acertaste con la calificación del jefe de medicina legal bronley, ojala la fiscal escuche el pedido de la gente y ya lo bote de medicina legal, realmente es un caradura que nadie sabe para quién trabaja, ahora dice que los cabitos es comparado con un campo de concentración, minimiza sin ver la posible enfermedad de fujimori politizando el tema entre otras perlitas como tener amiguitas en su oficina...