Cumbia

Bareto sacó a la venta este 21 de agosto su segundo álbum y tercer disco, Cumbia. Las canciones del disco son en su enteridad covers de temas clásicos de la cumbia peruana como "Vacilando con Ayahuasca", "Se ha muerto mi abuelo" o la archi conocida "Soy un muchacho provinciano".

El grupo ha logrado impregnar los temas con su toque especial logrando así una mezcla de música amazónica, con riffs de jazz y reggae. El producto de esta mezcla es muy bueno, pero sobretodo divertido.


Crítica caviar

Pero las críticas a este trabajo no se han hecho esperar (así como tampoco lo hicieron con su primer disco y EP). La razón es simple y se puede enunciar a manera de frase: "¿Qué derecho tienen estos limeños barranquinos de hacer un tributo a un estilo musical con el que nada tienen que ver?"

Lo curioso es que esa razón de crítica que se presenta a manera de pregunta o enunciado no suele venir de los hijos de la selva o de los limeños "populares" a los que supuestamente esta música les pertenece de manera monopólica, como un tesoro último intocable e inalterable.

La crítica viene más bien de los mismos limeños (en algunos casos tanto o más barranquinos como los Bareto). ¿Por qué una crítica tan dura a lo que es un tributo y no pretende ser una usurpación?

Lanzamos algunas ideas que nos pueden orientar y hacer entender esta crítica:

- En primer lugar Bareto sí es un grupo del circuito limeño barranquino y los miembros de esta agrupación no son de estratos populares o de escasos recursos. Esto último se vuelve relevante cuando la crítica apunta hacia el hecho de que los verdaderos dueños de la cumbia son los limeños "populares" y nada más. Un análisis más profundo nos demostraría que el término "popular" ya no significa nada en el debate peruano, así como sus primos "populista" o "comunista".

- Este grupo todavía no ha salido de su circuito barranquino para tocar en otros lugares como los conos limeños, pero sí ha tocado en Asia y Larcomar, lugares a los que acude gente adinerada y donde se han reconocido numerosos casos de discriminación étnica y racial.

- Por estas razones, el grupo no estaría en la capacidad o no tendría la autoridad para producir y lanzar un disco de cumbia, ya que estaría usurpando un producto "popular" y lo estaría llevando a la esfera "pituca"; de esta manera, estaría trasgrediendo su origen, su naturaleza primera.

Sin duda resulta paradójico que en discotecas de Larcomar se baile "Muchacho Provinciano" a la vez que no se permita la entrada de personas con rasgos andinos o indígenas. Pero ese hecho excede a lo musical, a mi parecer. Resulta también paradójico que en estas mismas discotecas (de Asia y Larcomar) se presente el cantante "Tongo" y que éste haya pasado de ser ídolo popular a ícono-bufón de la clase alta y el círculo mediático limeño. Sin embargo no parece haber traición en la actitud de Tongo. Tongo no trasgrede con su origen, sino que lo lleva más allá, lo hace verdaderamente popular (en el sentido estricto de la palabra).

Pero Tongo sí traiciona de alguna manera: ya no se quiere presentar en los mismos lugares de antes, ahora sólo le gustan las gringas pitucas, etc. Siguiendo con las paradojas, observamos que Tongo se ha vuelto ídolo de estos críticos de Bareto. Aún así Tongo sigue sin trasgreder. ¿Por qué?

Esperamos comments que nos puedan seguir dando pistas acerca de este asunto. Por mientras les dejamos el myspace de Bareto para que le den una chequeada y la entrevista del día de hoy a su guitarrista y productor, Joaquín Mariátegui en Perú.21 en la que toca de alguna manera estos temas.

El disco se presenta mañana, 4 de setiembre en la discoteca Vocé de Lince.


Y es que ese es al fin y al cabo el objetivo último de la música: divertir, compartir, vacilar sin ahuevamientos o clichés estúpidos.

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